Por fin llegó el gran día. El pasado 28 de Julio hice mi última inmersión como buceador profesional, después de 43 años dedicados al trabajo subacuatico y haciendo balance me siento muy afortunado, he trabajado en lo que más me gusta y he podido jubilarme cuando aún me encuentro fisica y mentalmente en muy buenas condiciones.
Ahora voy a disfrutar de la vida, bucear solo por placer, dedicar más tiempo a la familia y hacer ese montón de cosas que tengo pendientes (no voy a tener tiempo de aburrirme).
Espero que algún día, no muy lejano, se solucionen todos los problemas que hemos estado padeciendo y esta profesión tenga todo el respeto que se merece.
Un saludo a todos y tened mucho cuidado ahí abajo.