"¡¡Accidente probocado por la maniobra de heimlich ...

[franpiscis]

Cuaderno de Bitácora 14.05.09:

"¡¡Accidente probocado por la maniobra de heimlich ... ojo te podría haver pasado a ti!!!

Hola buzos,
por fin llega el buen tiempo. El agua se calienta, la luz del sol es otra... El invierno duro va dejando paso al color de la primavera, por todas partes la brisa marina envuelve el entorno, no deja ningún lugar sin acariciar.
El agua se va calentando, 15 graditos y subiendo.
La visibilidad como siempre haciendo de las suyas, por momentos 15 metros por momentos 20, por momentos 10, es la primavera que el mar altera.
Los buzos se van dejando caer por Piscis Diving uno detrás de otro. Los comentarios más eufóricos que nunca, preguntan por la Reserva Marina. Buzos que año tras año han visto el deterioro de nuestros fondos de primera vista se preocupan ahora más que nunca del estado de los estudios sobre la reserva marina. En principio las informaciones que se dan desde la dirección de pesca son mínimas. El miedo al rechazo de algunas personas de la poblaciones afectadas impone una discreción total. Los estudios se tendrían que empezar en las próximas semanas, pero solo es eso lo que sabemos, la zona a proteger serán 2500 hectáreas más o menos, que será todo nuestro término municipal. Sabemos que no se podrá realizar la pesca de arrastre en esta zona, pero poco más, según vaya teniendo noticias os iremos informando.

Nadie sabe que existes sino te levantas un día y gritas bien alto que te están pisando y eso es lo que le pasa a la administración en estos momentos, nadie sabe de vuestra existencia, no es conciente que solo en Cataluña tenemos más de 40.000 buceadores, buceadores que todos los años se reúnen para limpiar los fondos submarinos. La administración siempre ve a los que se quejan siempre de todo, a los que no construyen, sino más bien destruyen, a los que no hacen nada, más que frenar cualquier cosa que se salga de lo que ya está establecido, sin pensar ni un solo momento de lo que puede llegar a beneficiar a su pueblo, políticos y sus votos, que mala combinación. Los líderes ven la luz delante de sus propios ojos, pero siempre con tanto miedo de dar un paso sin que le cueste el puesto que al final los ciudadanos nos vemos retrasados respecto al resto de países. Qué miopía política la del miedo, miedo a la perdida de un voto. Todos somos culpables, todo el que ve una injusticia y no la denuncia, todo el que ve lo precioso que sería tener un entorno limpio y cuidado y no grita bien alto para que lo oiga todo el mundo, que aquel que ama lo que tiene nadie se lo puede arrebatar por muchos votos que tengas y más cuando al final no será para nadie y quien mejor que tu buz@, quien mejor que el hombre rana, podría explicar que un día se encontró restos de botellas de mirinda, de aquella que ya no tomamos, que se encontró plásticos de aquellos que nadie hubiera recogido si no fuera por tu amor a la naturaleza, que el mar es un espejo de lo que pasa en la trastienda de países bananeros y aquí en el primer mundo y delante de nuestros ojos pasa con total inmunidad el desprecio a nuestro entorno.

Se acaba el turismo de sol y playa. ¿Qué les daremos a nuestros turistas?, un montón de mares inertes sin vida, poblados de restos humanos, herencia de los que todavía no han nacido. Qué difícil es dios mío, amarte, sin que alguien no te intente dar una colleja, como te quiero mar mediterranea.

El curso de Rescue Diver había salido muy bien. Las historias de buceo se sucedían una tras otra, analizándolas enseguida los alumnos se daban cuenta de que al final un buen rescate de buceo se hace antes de que haya sucedido la tragedia. Entendían que cuando el marrón ya no tenía marcha atrás lo mejor siempre es conservar la calma, relajarte respirar, pensar y actuar. Los buzos miraban entretenidos, con los ojos más abiertos que nunca, como las aventurillas servían de entrenamiento mientras aprendían. Entonces, mientras daba clase, llegaron más buzos, estos solo querían informarse sobre las salidas de buceo del día siguiente, en un alarde de confianza, les di un pequeño descanso a los alumnos, llevábamos 2 horas de clase. Con tal de explicar al resto de la tribu cual sería la inmersión que realizaríamos al día siguiente, los buzos escuchaban mi briefing con atención, los tenía sumidos en el trance subacuático, solo les faltaba la botella....

Mañana iremos a sofreras, la inmersión se realiza en un entorno que nada más llegar a superficie te das cuenta de lo bonito que llega a ser Sant Feliu de Guixols. Sofreres recibe este nombre porque la pared es de color del azufre y en catalán azufre es sofre. El mar en este sitio con tramuntana incluida y debido a su forma de piscina natural es el sitio ideal para realizar la primera inmersión de la temporada.
Llegas al punto de buceo en 10 minutos y el color claro de sus aguas invita a darte un chapuzón, apenas si tenemos 5 metros de profundidad debajo del barco y poco a poco iremos descendiendo hasta alcanzar los 22 metros de profundidad, nacras, pulpos, sepias, nudibranquios y demás especies irán iluminando nuestro camino. Las cámaras tienen tema más que de sobra. Es una inmersión muy, pero que muy fácil.

De repente los buzos que estaban realizando el curso de Rescue Diver se levantan de la silla y como buenos alumnos empiezan a practicar las maniobras aprendidas, uno de los buzos ni corto ni perezoso, le da la vuelta al otro, mientras tanto yo sigo explicando la inmersión, cuando lo tiene mirando para Bilbao, lo abraza por detrás y desliza sus brazos hasta la altura de la barriga, yo mientras tanto intento darle una seriedad al club. El buzo en cuestión no duda un momento en realizarle la maniobra de heimlich, es tal el entusiasmo que pone el buzo en la demostración, que de repente se escucha un ruido seco acompañado de otro ruido, esta vez húmedo. El buzo sorprendido por la reacción de su cuerpo al efectuarle la maniobra de desatragantamiento y con la frase del compañero que pasara a la historia, asustado en principio y desahogado, se queda más a gusto que diós. Mientras el compañero no para de repetir:
- "Ya te lo decía yo que si tenias algo dentro con esta maniobra te lo hacia sacar", el buceador parece que cojea, no es que se allá hecho daño en la extremidad, es que los gallumbos, con semejante carga se convierten en arma de destrucción masiva y ya sabemos que lo que sucede cuando a uno le acusan de portar armamento de estas características.
Mientras tanto intento disimular con los buzos a los que les estaba explicando la inmersión del día siguiente,
- "Yo quiero ser de este club de buceo", me dice uno de ellos,
- "¿Qué tengo que hacer?". A lo que yo le contesto,
- "Simplemente estar, disfrutar y no liarla más de la cuenta".

Los alumnos aun se encuentran aletargados por la risa que terminan de pasar. Como niños sueltan carcajadas recordando los acontecimientos que terminan de acaecer y a voces me preguntan que si me he enterado, como para no enterarse con lo que retumban las paredes del Piscis Diving, menos mal que estaban abiertas las puertas de par en par y corría el aire.

Buen buceo buzos,
Fran

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